Entre 1941 y 1944, casi un millón y medio de judíos ucranianos fueron asesinados como resultado de la invasión
de la Unión Soviética por la Alemania nazi. Solo una minoría de ellos lo fue después de su deportación a los campos de exterminio. La inmensa mayoría murió bajo las balas de los Einsatzgruppen (unidades de matanzas móviles en el Este), de unidades de las Waffen SS, de la policía alemana y de colaboradores de Europa del Este.
Desde 2004, el padre Patrick Desbois y la asociación Yahad-In Unum llevan a cabo un trabajo metódico sobre esta parte aún poco conocida del Holocausto: identificar y evaluar todos los sitios de exterminio de judíos perpetrados por las unidades móviles nazis en Ucrania durante la Segunda Guerra Mundial. La exposición organizada en el Memorial de la Shoah del 20 de junio de 2007 al 6 de enero de 2008 presenta estas investigaciones aún en curso, que, reconstituyendo los procesos de los asesinos, permiten comprender mejor cómo se llevó a cabo el genocidio de los judíos en el Este de Europa.
Por fin es posible preservar y respetar la sepultura de las víctimas.