Evian, Munich y sus consecuencias

La conferencia de Evian

El 23 de marzo de 1938 Franklin Delano Roosevelt, Presidente de los Estados Unidos, toma la iniciativa de convocar una conferencia internacional sobre la cuestión de los refugiados procedentes del Reich. Antes de la conferencia, Roosevelt toma sus precauciones respecto a los 32 Estados convocados afirmando que no se trata de aumentar las cuotas de inmigración o de financiar la acogida de los refugiados. No se invita a Alemania, no se considera útil la presencia de Portugal. La URSS y Checoslovaquia no envían representantes, Italia, solidaria con Alemania, rechaza la invitación. Hungría, Rumania, Polonia y Sudáfrica envían observadores. El Reino Unido acepta la invitación sin antes asegurarse de que los Estados Unidos no intenten obtener un aumento del número de inmigrantes judíos en los territorios bajo mandato británico.

Los representantes de los 32 Estados que se reunirán finalmente del 6 al 15 de julio en el Hotel Royal en Evian (Francia) expresan sus condolencias a las víctimas de la persecución, al tiempo que afirman que la situación económica y social de su país no les permite aumentar los contingentes de inmigración. Una subcomisión interroga en una tarde a los representantes de cuarenta organizaciones de refugiados y las organizaciones judías, entre ellas las del Reich. La conferencia no produce ningún resultado concreto, sino que crea un Comité Intergubernamental para los Refugiados Con sede en Londres y destinado a dar seguimiento a esta reunión.

Los judíos alemanes y austríacos ven todas sus esperanzas desmoronarse. Los dirigentes nazis, seguros de que los gobiernos occidentales no impedirán su política, intensifican las medidas que obligan a los judíos a emigrar. Pero la ausencia de países de acogida impide a estos últimos salir de Alemania.


Los Acuerdos de Munich

Firmados en la noche del 29 al 30 de septiembre de 1938 por Alemania, Francia, el Reino Unido e Italia, estos acuerdos acuerdan las disposiciones y condiciones que regulan la cesión de los territorios de los Sudetes donde residen poblaciones alemanas, a Alemania.


La expulsión de los judíos de los Sudetes

Menos de un mes después de la firma de los Acuerdos de Munich en septiembre de 1938, Hitler expulsa a Checoslovaquia a varios miles de judíos que viven en la región de los Sudetes. Los checoslovacos se niegan a dejarlos entrar y tratan de refugiarse en Hungría. Pero son devueltos a Alemania por las autoridades húngaras y luego nuevamente dirigidos hacia Checoslovaquia por las autoridades nazis. Finalmente son conducidos a la fuerza hacia campamentos de tela improvisados instalados en una tierra de nadie que separa Hungría y Checoslovaquia, como en Mischdorf, a unos veinte kilómetros de Bratislava.


La expulsión de los judíos polacos

El 31 de marzo de 1938, el Parlamento polaco aprueba una ley que define toda una serie de casos en los que un ciudadano polaco que vive en el extranjero puede ser privado de su nacionalidad. En octubre de 1938, un nuevo decreto anuncia la anulación de los pasaportes de los polacos residentes en el extranjero que no hayan obtenido una autorización especial para entrar en Polonia antes del final del mes. Sin embargo, más del 40% de los judíos que viven en el Reich nacieron en Polonia.
Los días 27 y 28 de octubre de 1938, la policía y las SS arrestan y reagrupan a todos los judíos polacos de sexo masculino, los transportan a las cercanías de Zbaszyn, ciudad polaca, donde les hacen cruzar el río que separa los dos países. Las mujeres y los niños privados de todo medio de subsistencia están obligados a seguir a los hombres. La mayoría de ellos llegan en tren, con pocas pertenencias y una cantidad de dinero limitada a 10 marcos por persona. Los Grynszpan, una familia judía originaria de Hanóver forma parte de los 16.000 judíos polacos deportados a la frontera; su hijo Herschel se encuentra en la clandestinidad en París. Al llegar a Polonia, de acuerdo con las instrucciones recibidas, los guardias fronterizos polacos los devuelven.

Dessin publi� dans le New York Times � l'occasion de la conf�rence d'Evian (Haute-Savoie), exprimant l'impossibilit� pour un homme 'non aryen' de trouver un pays dans lequel se r�fugier. Etats-Unis, 3 juillet 1938.

Dibujo publicado en el New York Times la ocasión de la conferencia de Evian (Haute-Savoie), expresando la imposibilidad para un hombre 'no ario' de encontrar un país al que huir. Estados Unidos, 3 de julio de 1938.
Cr dice fotográfico: M morial de la Shoah/CDJC.

Carte postale comm�morant les accords de Munich
sign�s dans la nuit du 29 au 30 septembre 1938 par Arthur Neville Chamberlain, �douard Daladier, Benito Mussolini et Adolf Hitler. Allemagne, 1938.

Postal comunicando los acuerdos de Munich signed en la noche del 29 al 30 de septiembre de 1938 por Arthur Neville Chamberlain, douard Daladier, Benito Mussolini y Adolf Hitler. Alemania, 1938.
Cr dice fotográfico: M morial de la Shoah/CDJC.

Un membre de l'Union �tudiante am�ricaine proteste contre l'agression de la Tch�coslovaquie par Adolf Hitler. New York, Etats-Unis, 23 septembre 1938.

Un miembro de la Unión Tudinense protesta contra la agresión de la Checoslovaquia por Adolf Hitler. Nueva York, Estados Unidos, 23 de septiembre de 1938.
Foto: M morial de la Shoah/CDJC/USHMM.