Homenaje a Samuel Willenberg, fallecido el viernes 19 de febrero de 2016

A los 19 años, Samuel Willenberg, alias Samek y originario de Częstochowa en Polonia, es deportado al campo de exterminio de Treblinka. Joven y robusto, es elegido a su llegada al campo para trabajar en la clasificación de los bienes de los prisioneros exterminados. Más tarde, será asignado a un grupo para podar los árboles del bosque que rodea el campamento. Es en este período que los sueños de escape comienzan a obnubilarlo.

En el campo, la supervivencia se organiza entre los prisioneros. Consiguen cambiar a los guardias ucranianos algunas monedas de oro o diamantes sacados de los bolsillos de las víctimas por comida. Al anuncio de la insurrección del gueto de Varsovia, los prisioneros de Treblinka sacan fuerzas de sus últimas fuerzas para organizar una revuelta de una audacia y un valor inimaginables.

El 2 de agosto de 1943, el campamento se incendia. Solo un pequeño grupo de unos 200 prisioneros logra escapar corriendo bajo la valla eléctrica a pesar de los disparos de las SS. Herido en la pierna, Samuel Willenberg logra escapar y comienza una larga caminata solitaria a través de los bosques y las llanuras, escondiéndose para sobrevivir. Finalmente regresó a Varsovia para continuar su lucha contra los alemanes en el seno del primer movimiento de resistencia polaco, el Armija Krajova (AK). Sin embargo, como judío deberá seguir desconfiando de sus nuevos compañeros.

Sobreviviente del Holocausto, Samuel Willenberg se muda a Israel en 1950 y se convierte en funcionario del Ministerio de la Vivienda. Después de más de cincuenta años de silencio, restituye lo inconcebible, el absurdo y el horror de Treblinka en un libro titulado «Révolte à Treblinka» (Ramsay, 2004). Este relato es un hermoso homenaje a la memoria de las víctimas, como sus dos hermanas, a su valentía y sufrimiento. Samuel Willenberg mantendrá esta memoria acompañando a delegaciones en Treblinka, dando conferencias, entregando su testimonio y dibujando y esculpiendo obras relacionadas con su historia.

En trece meses, cerca de 870.000 judíos fueron asesinados en el campamento de Treblinka.

Véase también: «Revuelta en Treblinka»